Todos tenemos nuestros lugares preferidos en donde soltamos nuestra imaginación, en donde damos riendas sueltas a nuestros pensamientos y formas de pensar, esos lugares son mágicos. El mío me lo reservo. Los que me conocen hace años saben de él. Ahí mi mente cabalgaba imaginándome cómo se podía vivir en estas islas hace 500 ó 600 años, cómo se podía recorrer los paisajes que habitualmente nosotros vemos andando, en coche o en bici o a saber. Pero jamás pensé que un día pudiera yo formar parte de un pequeño grupo de privilegiados que íbamos a conocer todas esas preguntas que me embargaban y daríamos a conocer al resto de canarios y del mundo.
Sí, se explicará cómo vivían, qué comían, cómo vestían, cómo convivían, dormían, se relacionaban consigo mismos y con el resto de las islas, cómo momificaban a sus muertos, qué concepto de religión tenían…todo, pero TODO… está todo escrito, sí, sí, es que ellos escribían y relataban todo lo que yo les estoy contando, dejaron un legado de pieles escritas relatando su forma de vida y su civilización. Qué bueno que esta ilusión, que jamás pensamos pudiéramos llegar a saber, se va a conocer en tan solo 6 días.
Son tantas las ilusiones depositadas en este proyecto que a veces pienso que es un sueño bonito simplemente.
Todos los nacidos en estas maravillosas islas somos canarios. De entre todos, los hay que jamás han recorrido su tierra y los que jamás se han preocupado de qué será de la misma cuando ya nosotros no estemos aquí.
Yo doy gracias de haber estado en todas las islas, habiéndolas caminado y recorrido, y en algunas pocos lugares me quedan por ver, he recorrido la mayoría y más emblemáticos barrancos de las islas. Y es que mucho ha cambiado la fisionomía de nuestro entorno y aún así, sigue siendo maravilloso salir al campo o al monte como se dice por esta isla y ver lo bonito que está todo. Aún así, a veces yo mismo, con la edad que tengo y con el paso de los años, recorro algún lugar y viendo cómo ha cambiado me desilusiono y me pregunto en qué estamos convirtiendo esta tierra.
Yo doy gracias de haber estado en todas las islas, habiéndolas caminado y recorrido, y en algunas pocos lugares me quedan por ver, he recorrido la mayoría y más emblemáticos barrancos de las islas. Y es que mucho ha cambiado la fisionomía de nuestro entorno y aún así, sigue siendo maravilloso salir al campo o al monte como se dice por esta isla y ver lo bonito que está todo. Aún así, a veces yo mismo, con la edad que tengo y con el paso de los años, recorro algún lugar y viendo cómo ha cambiado me desilusiono y me pregunto en qué estamos convirtiendo esta tierra.
Néstor de la Torre |
Los aborígenes canarios o como ya los llamamos algunos, los Gachumbas, convivían con el entorno y se adaptaban a él casi mimetizándose con el mismo. Nosotros vivimos en una vorágine de consumo que nos convierte en devoradores de recursos de la tierra hasta extremos inauditos. No es más inteligente el ser humano hoy en día del que vivía por estos lares hace de esto 500 años o más, y es que como ya expliqué en su momento son sólo 12 generaciones las que nos separan de estos Gachumbas. Yo en particular siento a menudo la llamada de la tierra, y siento que necesito descalzar mis pies y pisar en suelo con los pies desnudos para así sentirme unido a la madre tierra.
Creo que es obligación moral de todos los canarios ya no sólo el ver todas las islas para así poder decir que la nuestra tierra es la más bonita, pero no nuestra isla, no es la tuya , ni la mía, ni la de allá, ni la de acá, ni la más vieja, ni la más joven, ni la redonda, ni la triangular, ni la más alta ni nada…nada…nada…son nuestras Islas Canarias, las de todos los que vivimos aquí.
Un pueblo sin raíces es un pueblo sin arraigo, y es un pueblo separado, y es un pueblo enfrentado, y es un pueblo manipulable. Debemos como canarios defender lo nuestro. Vivimos en el mejor lugar del mundo, por climatología, por diversidad de especies vegetales, por seguridad y por entorno en general. Dentro de poco le sumaremos también por cultura histórica añadida desde nuestros ancestros.
Néstor de la Torre |
Que mejor forma de defender lo nuestro que es conociendo nuestra verdadera historia, con pruebas, no con intereses de historiadores que se debían a quienes les pagaban. Opino que la historia fue manipulada con intenciones ocultas.
Pero ahora debemos pasar página, debemos reescribir la historia realizando las correcciones necesarias para que queden subsanados los errores. Ya luego y más adelante se realizarán los debates de por qué se negó a un pueblo la verdad del mismo. Ahora es el momento de presentar pruebas, de dejar que los científicos-especialistas las estudien y dejar que los historiadores reescriban la historia. ¿No creen?
Néstor de la Torre |
¿A quiénes perjudica decir la verdad ahora mismo?. Cuando haya pasado el 20N, debemos todos y cada uno de nosotros hacer una reflexión sobre “todo”. Deberemos replantearnos que quizás se hayan equivocado algunos de manera intencionada o por error, pero ahora mismo opino que hay que dejar hacer su trabajo a quienes lo llevan haciendo hace meses, a quienes llevan estudiando emplazamientos aborígenes, a quienes llevan descubriendo atropellos antropológicos, sustracciones de momias, trapicheos a todos los niveles.
Demos la oportunidad de presentar las pruebas de las que se está hablando desde hace meses por la red. Luego y de manera individual, sin presiones de ningún tipo deberemos decidir de qué lado nos posicionaremos, del de la verdad o del lado de la mentira.
Néstor de la Torre |
En este proyecto hay cabida para todos. Ánimo, apoya la cultura de nuestros antepasados, apoya la verdad. Bienvenido al desentramado de las mentiras que han ahogado a una cultura por la friolera de más de 500 años.
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